Extractos des mensajes de T. Austin-Sparks
"Lo mejor que yo puedo esperar es que esto abra una ventana,
y que según usted mire a través de ella vea una sola cosa:¡Cuán superior es Jesucristo de todo lo demás!"
- T. Austin-Sparks
26 MARZO
“Yo soy la vid verdadera.” (Juan 15:1)
La vid verdadera es aquella que cumple con el propósito único de su existencia. Así que Jesús trae esta ilustración a Sí mismo y a Su Iglesia; y aquí está completamente clara cuál es la naturaleza del Señor Jesús. Él llega a todos los hombres y abarca el mundo entero. Él invita a TODAS las naciones a Su corazón. TODOS los hombres son Su preocupación y no una sola nación. Él les dice a Sus discípulos, “Id y haced discípulos a TODAS LAS NACIONES.” (Mateo 28:19). Es la misma naturaleza de Jesús la que hace esto. Es totalmente ajeno a Él el ser exclusivo, pequeño, estrecho y ocupado en Sí mismo. Está bien que pensemos en todo esto en forma objetiva, pero tiene que bajar a cada uno de nosotros.
¿Cuál es la prueba de que Cristo está en usted y en mí? ¿Cómo se sabe que Cristo está en nosotros? Solo de una manera – que otros estén recibiendo la Vida a través de nosotros, que ministremos la Vida de Cristo en los demás, que cuando la gente hambrienta y necesitada entre en contacto con nosotros, sientan el toque de la Vida. Ellos pueden expresarlo de diferentes maneras, pero equivale a esto, “Ese hombre y esa mujer, tienen algo que yo no tengo y lo necesito.” Esto debe ser cierto en cada cristiano, porque Cristo está en nosotros, expandiéndose y ministrando Su Vida a través de nosotros.
Oh, amigos, oremos cada día cuando nos levantemos, “Señor, hazme hoy un canal de Vida para alguien. Señor, ministra tu propia vida a través de mí a alguien hoy. Que pueda llevar Vida a dondequiera que yo vaya.” El Señor no tiene otro propósito para usted ni para mí. Podemos tratar de hacer un montón de cosas, pero si pertenecemos a la Vid, no vamos a ser buenos en nada, excepto llevar Su fruto, que es llevar Vida a los demás.
Preservando los deseos de T. Austin-Sparks con respecto a que se debe entregar libremente lo que libremente se ha recibido y se reproduzca palabra por palabra, si eliges compartir los escritos con otros, te pedimos que, por favor, los ofrezcas libremente: sin costo, sin pedir nada a cambio, enteramente libres de cualquier cambios, y siempre con esta declaración incluida.